domingo, 25 de julio de 2010

LA CONTAMINACION DEL AGUA




El agua puede morir

Las plantas y animales que viven en los océanos, lagos y ríos obtienen todo el aire y alimento que necesitan del agua que los rodea. El agua no es sólo una combinación de oxígeno e hidrógeno, sino también el elemento en el cual viven en perfecto equilibrio entre sí sus animales, plantas y bacterias. Todo esto crea un ecosistema equilibrado. Sin embargo, somos los seres humanos que debilitamos y dañamos ese equilibrio.

Hay que comprender, que todo lo que botamos, desperdicios de la ciudad, desechos industriales, aguas negras van a parar en los ríos, mares y lagos ensuciándolos. Algunos productos químicos, usados en gran cantidad en la agricultura y en la industria, no pueden ser digeridos por el agua. Todos estos elementos contaminan el agua.
Contaminar el agua significa envenenarla, matarla; aguas malolientes, manchas de petróleo, nubes de espumas, peces muertos que flotan en la superficie. No existe hoy día un océano en donde no haya señales de contaminación, este es el mayor problema del ecosistema. Más del 80% viene de las actividades de tierra firme. Las condiciones empeoran en áreas de aguas cerradas, como el Mediterráneo, Mar del Norte y lagos. Hay que tomar medidas para prevenir y combatir la contaminación, así como sucede en los derrames de petróleo.No obstante, hay tipos de contaminación del agua que se dan por una sobredosis de nutrientes en el agua, e esto sellama eutrofia.

La Eutrofia
La eutrofia significa buena alimentación. Es un tipo de contaminación debido a un exceso de sustancias nutritivas acumuladas en el agua. Esto provoca un trastorno del ecosistema en los lagos, estanques, ríos y mares. Es una contaminación que podríamos definir como de indigestión.
En el ma
r la eutrofia ocurre en la desembocadura de algunos ríos que, al atravesar ciudades, zonas agrícolas e industriales, recogen grandes cantidades de residuos de todo tipo, entre ellos contenidos y compuestos de fósforos y nitrógeno.
El nitrógeno y el fósforo son elementos importantísimos para las funciones vitales de las algas. Con tanta abundancia de nutrientes se reproducen y se multiplican en forma desmesurada estas algas, las cuales, como sabemos, producen oxígeno.
La gran cantidad de oxígeno que producen con la fotosíntesis atrae en la zona un enorme número de peces, y, sobre todo, causa la multiplicación de pequeños organismos, las bacterias barrenderas que se alimentan de algas muertas y que contribuyen a mantener el mar limpio.
Las condiciones parecen así favorables para todos, dada la abundancia de alimentos y de oxígeno, pero rápidamente el equilibrio se rompe. Por el continuo crecimiento de algas, el depósito de éstas (muertas) aumenta en forma considerable, atrayendo un número siempre superior de bacterias barrenderas que consumen todo el oxígeno disponible en el agua.
La situación que se crea provoca, por consiguiente, millares de peces muertos por asfixia. La batalla entre las bacterias barrenderas y las algas muertas por destruir se resuelve al final a favor de estas últimas y el mar se convierte en una extensión de algas en putrefacción.